“El Poder de la Palabra” es uno de mis temas favorito. A través de mi búsqueda espiritual lo he
observado y experimentado en distintas
formas. En mi infancia me educaron en la
Iglesia Católica y aprendí a recitar el
Santo Rosario a la Virgen. A los 18 años
inicie en un grupo esotérico y me enseñaron los mantra, en las escuelas o
filosofías Orientales se dedican a la
devoción con ejercicios y prácticas de mantras, oraciones, mudras y posturas.
En las escuelas metafísicas recitan los “Decretos Metafísicos” y en el Chamanismo realizamos los rezos cantando y la mayoría de
las personas espirituales repiten el
OM.
¿Qué tienen en común todas estas escuelas espirituales? Utilizan el
Poder de la Palabra, repitiendo una y otra vez la palabra, frases u oraciones.
La constante repetición produce un efecto en la mente y cuerpo. Ayudan a subir la vibración, mejorar la salud
física y despejar la mente de ataduras mentales o preocupaciones.
Lo más reciente en mi vida ha sido las prácticas del Ho’oponopono. ¿Qué hace?
Pues… ya sabes, lo mismo… Por ser
una innovación, algo moderno de una forma más sencilla y sobre todo en nuestro
idioma español (comparado con los mantra sánscrito en idioma de los Vedas). Nos ayudan en estos tiempos cibernético y tecnológico
a realizar la tarea de meditar y practicar con el Ho’oponopono.
Hermanos y Hermanas es tiempo de buscar un espacio y tiempo en realizar
la tarea de ejercitar la voz, para crear el cambio... Utiliza el Poder de la Palabra para realizar
lo que resuena contigo: un rosario, mantra, oraciones y/o el Ho’oponopono. Aprovecha el tiempo para expandir el Espacio
dentro de ti. El espacio o la energía divina, Dios (describe a tu
manera, según las creencias). El Ser Divino que vive dentro de nosotros hay que
expandirlo y estar en su presencia.
Repite “Divinidad limpia en mi lo que está contribuyendo a que aparezca
este problema” Después hay que afirmar: “Lo siento, te amo, perdóname,
gracias”.
No inviertas el tiempo en los entretenimientos de la vida moderna,
demasiada tecnología cibernética, redes sociales, celulares, televisión, etc.
Tampoco es que vivamos en un monasterio pero...
Busca un espacio y lugar, recuerda el libro de Genesis (Biblia) la cita:
Hágase la Luz y la luz se hizo. Es el mejor ejemplo que tiene la palabra. Recuerda
hacer tus prácticas de preferencias con un hermoso Cristal de Cuarzo para acumular y amplificar
la energía para sanar a tu
niño y niña interior. El Cristal amplifica tu campo energético.
Otras Referencias de Estudio:
Dr. Ihaleakala Hew
Len
Morrnah Simeona
Mabel Katz
Joe Vitale
Vivi Cervera
Jocelyne Ramniceanu
¡Estamos listos para la sanación!
Bendiciones de Luz, Sylvia
Flor de Lis
por Mabel Katz
El Ho’oponopono en realidad es muy simple. Para los antiguos Hawaianos
todos los problemas se reducen a un pensamiento. Pero tener un pensamiento no
es en sí un problema. Entonces ¿cuál es el problema? El problema es que todos
nuestros pensamientos están imbuidos de memorias dolorosas, memorias de
personas, lugares y cosas.
Ho’oponopono
Hooponopono; un sistema ancestral de comprender la vida y el espíritu
que ofrece respuestas para nuestro mundo actual y que el Dr. Ihaleakala ha
puesto al día.
Herramienta de Limpieza Ho’oponopono.
La Flor-de-lis es un proceso de limpieza que libera las
memorias de los derramamientos de sangre de la guerra constante y la esclavitud
de ideas, lugares, situaciones y creencias que, a su vez, causan guerra
constante. La forma de usarla es “Yo
pongo la Flor-de-lis sobre la situación”.
Ho’ponopono es una técnica de
sanación descubierta por el
Dr. Leen (Ihaleakala Hew Len), basada en la tradición y creencias hawaianas.
Este doctor fue capaz de curar un pabellón entero de pacientes criminales desequilibrados
mentales sin siquiera ver a ninguno de ellos. El psicólogo estudiaba la ficha
del preso y, enseguida, miraba hacia su interior con el fin de ver como él
había creado la enfermedad de esa persona. A medida que él mejoraba, el
paciente también mejoraba. Ho’oponopono significa “corregir un error” o “hacer
lo correcto” y es una práctica que se realizaba desde hace mucho por la
Tradición Huna.
Esta técnica se basa:
1. En la creencia de que nosotros creamos nuestra realidad, somos
cocreadores y todo lo que vemos, experimentamos, toda la gente que nos rodea,
todo lo que conforma nuestro mundo está ahí porque nosotros lo hemos creado, le
hemos pedido que esté por alguna razón o motivo. Está ahí porque así se lo
pedimos y así lo consienten… por consiguiente nosotros somos los responsables
de lo que ocurre en nuestro mundo. Hemos de aceptar que tenemos el 100% de
responsabilidad en las cosas que ocurren.
2. Nuestra mente se compone de un Consciente, un Supraconsciente y un
Subconsciente al que muchos identifican con el Niño Interior, Niño que posee la
llave de nuestra felicidad y almacena en su poder información de todo lo
acontecido en esta y otras vidas. Digo que tiene la llave de nuestra felicidad,
porque hay muchas experiencias que las estamos fabricando pero no somos en
realidad conscientes de ello, las está creando este niño o subconsciente
partiendo de los datos que posee de experiencias antiguas. El afán de este Niño
es ser feliz, como cualquier otro niño en el mundo, él te ama y se identifica
con tu ser físico. Como cualquier niño necesita que le prestes atención, le
encanta que le mimes y necesita sentirse verdaderamente querido, valorado y
protegido. Tenemos que llegar a comprender que la mente es perfecta pero no las
memorias que contiene, los datos con los que trabaja y es ahí donde incide esta
técnica, en la corrección de lo errado de esas memorias y datos, en la
corrección de la visión y la creación de este Niño Interior que a toda costa
intentará protegerte y hacer que le tomes en consideración, incluso usando el
sabotaje de tus proyectos para conseguirlo si es necesario.
3. Hay una Divinidad cuya sabiduría y poder son muy superiores a las
nuestras y que nos ama incondicionalmente.
4. Tenemos que estar dispuestos a dejar todo en manos de esta Divinidad
para que sane nuestros recuerdos, sentimientos, creencias….., para que sane la
raíz misma de toda experiencia no deseada o dolorosa que tengamos y para que
sane a un mismo tiempo a los demás. Tenemos que estar dispuestos a aceptar
nuestra responsabilidad y también a un mismo tiempo aceptar la ayuda de la
Divinidad, aceptar que es con esta ayuda con la que podremos sanar y ser
sanados.
Para poder practicar esta técnica hay que conectar con nuestro Niño
Interior y pedirle que se comunique con la Divinidad y le diga: “Divinidad limpia en mi lo que está
contribuyendo a que aparezca este problema” Después hay que afirmar: “Lo
siento, te amo, perdóname, gracias”. Al hacer esto estoy pidiendo a la Divinidad que cancele programas
(memorias) en mí para que ellos sean cancelados también en las otras personas,
estoy pidiendo sanar mi Niño Interior para sanarme a mi mismo y a los demás.