viernes, 23 de junio de 2017

Verano en Acción




COMPARTIENDO COMPRENSIONES

Hermanos que la fuerza transformadora de la Compasión, esa que contiene en si misma la más alta expresión del Amor Incondicionado, llene nuestros corazones y nos libere del consumismo destructor!!!! Es mi sincera plegaria.

El amor es lo que salvara a humanidad, mientras dejamos que ese amor incondicionado sea la tónica de este tiempo, preparemos el terreno para un mundo mejor rectificando algunas distorsiones sobre los aspectos centrales de la vida.

“El trabajo dignifica”. Un buen trabajo bien hecho es una de las fuentes mayores de satisfacción que nos ofrece a todos los humanos, la vida. Es el lugar donde servir, donde poner nuestro “granito de arena” para mejorar al mundo. Es la oportunidad de generar “Belleza que disipa el caos”.

Haciendo nuestro trabajo, con dedicación, como servicio a la vida, sentimos una de las fuentes de gratificación, un gozo por el deber cumplido. La madre que después de una jornada de trabajo, pone a dormir a sus hijos, junto con el cansancio siente la satisfacción del deber cumplido. Un agricultor, un horticultor cuando ve crecer el almácigo, cuando estalla el campo en flores que anticipan los frutos, siente la satisfacción del deber cumplido. Todo trabajo digno, por más sencillo que sea, el que limpia, el que prepara, el que enseña, el que cura, el que vende, el que distribuye, cuando hacen a consciencia su trabajo vuelven a casa con esa alegría del deber cumplido.

Hay sin embargo, culturas que han olvidado que, el humano crea, co-crea con Dios, cuando trabaja, cuando inventa, cuando produce.
Se ha extendido una creencia de que, cuanto menos trabajamos mejor es. Personas que llegan al trabajo pensando cuando se van a ir y empiezan el lunes pensando en cuando termina la semana.

Alguien que está siempre sin hacer nada, que como parásito vive del esfuerzo de los demás. ¿Se siente un ser valorable por esto? ¿Es mas feliz por esto? Vemos a diario seres que han perdido la cultura del trabajo y no por eso sus vidas son mejores por el contrario son vidas sin expectativas, sin sueños, sin significado, sin valor.

En algunas cárceles aún se conserva el castigo de no dejar hacer nada al que está en prisión como castigo por alguna indisciplina por algún perjuicio. En efecto, los que privados de su libertad, también son privados de la gloria de crear y cooperar con la vida mediante su trabajo se consideran doblemente privados.

En Agni Yoga se nos enseña los Estados Mentales en relación al trabajo:
1-    Rechazar el trabajo ocasiona  en nosotros, descomposición.
2-  El trabajar sin consciencia de lo  que hago, debilita nuestro espíritu y le impide fortalecerse.
3-   El trabajo con amor y devoción produce buena cosecha.
4-   El trabajo consagrado a la Jerarquía promueve un vínculo profundo con Aquellos que conocen y sirven.

Invoquemos juntos para que el trabajo bien hecho enaltezca a la raza de los hombres. Desde el corazón,

Marta N. Paillet



Vivimos en tiempos de cambios. Es la orden del día. En esta ocasión algo para reflexionar. Aprovechen la energía del Verano para moverse al cambio tan soñado y esperado.
Bendiciones de Verano,
Sylvia Rodríguez
Terapeuta Holística